La actividad física como medio para el mantenimiento de la salud

La actividad física no solo beneficia a nuestro cuerpo, sino también a nuestra mente. Sus efectos positivos abarcan un amplio espectro, desde la prevención de enfermedades hasta la mejora del estado de ánimo y la calidad del sueño.

Beneficios Fisicos

En el plano físico, la actividad física regular ayuda a controlar el peso corporal y a reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas como las cardiovasculares, la diabetes tipo 2, algunos tipos de cáncer y la osteoporosis. También fortalece los músculos y los huesos, mejora la flexibilidad y la coordinación, y aumenta la energía y la vitalidad.

Beneficios Mentales

En el ámbito mental, la actividad física es un poderoso aliado contra el estrés, la ansiedad y la depresión. Ayuda a mejorar el estado de ánimo, la autoestima y la capacidad de concentración. Además, reduce el riesgo de sufrir deterioro cognitivo y demencia en la vejez.

Calidad del Sueño

Por si fuera poco, la actividad física también tiene un impacto positivo en la calidad del sueño. Favorece un sueño más profundo y reparador, lo que a su vez se traduce en una mayor energía y bienestar durante el día.

Recomendaciones para la práctica de actividad física:

Cantidad:

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa a la semana para adultos. Esto equivale a aproximadamente 30 minutos de actividad física moderada al día.

Intensidad:

La intensidad de la actividad física debe ser suficiente para elevar la frecuencia cardíaca y la respiración, pero sin llegar a un punto de agotamiento. Se puede utilizar la siguiente escala para determinar la intensidad:

Leve: Puedes hablar con frases completas sin dificultad.

Moderada: Puedes hablar con frases cortas, pero no puedes cantar.

Vigorosa: Solo puedes hablar palabras sueltas.

Se recomienda combinar diferentes tipos de actividad física para obtener un mayor beneficio. Las actividades aeróbicas, como caminar, correr o nadar, son excelentes para mejorar la salud cardiovascular y pulmonar. Las actividades de fortalecimiento muscular, como levantar pesas o hacer flexiones, ayudan a fortalecer los huesos y los músculos. Y las actividades de flexibilidad, como el yoga o el pilates, ayudan a mejorar la flexibilidad y el rango de movimiento.

Frecuencia:

Es indispensable realizar actividad física con regularidad para obtener los beneficios, idealmente todos los días. Incluso pequeñas cantidades de actividad física pueden tener un impacto positivo en la salud.

Seguridad:

Se debe consultar con un médico antes de iniciar cualquier programa de actividad física, especialmente si se tiene alguna condición médica preexistente. El médico puede ayudar a determinar la cantidad, intensidad, tipo y frecuencia de actividad física adecuada para cada persona.

Ejemplos de actividades físicas:

1. Caminar: Es una actividad física sencilla y accesible para todos. Se puede realizar en cualquier lugar y momento, sin necesidad de equipamiento especial. Es una excelente forma de mejorar la salud cardiovascular, fortalecer los músculos y los huesos, y controlar el peso corporal. Se considera una actividad muy adecuada y necesaria para todo el mundo.

2. Correr: Es una actividad de mayor intensidad que caminar. Es una excelente forma de mejorar la resistencia cardiovascular, fortalecer los músculos y los huesos, y quemar calorías. Podría no ser adecuada para todos, pero con entrenamiento y progresión adecuada no reviste dificultad.

3. Nadar: Es una excelente actividad física de bajo impacto, ideal para personas de todas las edades y niveles de condición física. Es una excelente forma de mejorar la salud cardiovascular, fortalecer los músculos y mejorar la flexibilidad. Es una de las actividades más completas y especialmente recomendada para mejorar la capacidad aeróbica pulmonar.

4. Bailar: Es la actividad física más divertida y social. Ideal para personas de todas las edades y niveles de condición física. Es una excelente forma de mejorar la salud cardiovascular, fortalecer los músculos y los huesos, y mejorar la coordinación y el equilibrio. Y también ayuda a conocer nuevas personas, lo cual contribuye a nuestra salud emocional.

5. Montar en bicicleta: Actividad física aeróbica. Es una excelente forma de mejorar la salud cardiovascular, fortalecer los músculos y los huesos, y reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Puede ser una buena manera desplazarnos en nuestro entorno y conocer lugares nuevos.

6. Yoga: El yoga combina ejercicios de postura, respiración y meditación. Es una excelente forma de mejorar la flexibilidad, la fuerza muscular y el equilibrio. Es en cierto modo una forma de meditación física y por ende también produce beneficios mentales.

7. Tai-Chi: Es una actividad física de bajo impacto que combina movimientos lentos y controlados con la respiración y la concentración. Es una excelente forma de mejorar la flexibilidad, la fuerza muscular y el equilibrio. Al ser una técnica de meditación dinámica, también sirve para obtener beneficios psicológicos en el control del estrés y la ansiedad. Las asociaciones cardiológicas cada vez realzan más su papel en la rehabilitación cardiovascular, al igual que como ocurre con el Yoga.

8. Pilates: Es una actividad que se centra en el fortalecimiento del core, la mejora de la postura y la flexibilidad. Es una excelente forma de mejorar la fuerza muscular, el equilibrio y la salud mental.

La actividad física como medio para el mantenimiento de la salud

https://www.goredforwomen.org/es/healthy-living/fitness/fitness-basics/why-is-physical-activity-so-important-for-health-and-wellbeing

https://www.paho.org/es/temas/actividad-fisica

https://zemsaniaglobalgroup.com/los-beneficios-de-la-actividad-fisica-para-la-salud

https://www.wundertraining.com/la-importancia-de-la-actividad-fisica-en-nuestra-salud

https://medicinaysalud.digital/la-salud-que-es-y-como-se-conserva